Se han identificado materiales interestelares en nuestro Sistema Solar, pero su origen sigue siendo un misterio. Un estudio reciente sugiere que el sistema de Alfa Centauri, nuestro vecino estelar, podría ser su origen.
Esta imagen del cielo alrededor de la brillante estrella Alfa Centauri AB también muestra la estrella mucho más débil de tipo enana roja, Próxima Centauri, la estrella más cercana al Sistema Solar. Esta imagen fue creada a partir de fotografías del Digitized Sky Survey 2. El halo azul alrededor de Alfa Centauri AB se crea durante el proceso fotográfico, la estrella es realmente de color amarillo claro como el Sol. Crédito: Digitized Sky Survey 2 - Agradecimiento: Davide De Martin/Mahdi Zamani
Los objetos interestelares, como asteroides o cometas, no están ligados gravitacionalmente a una estrella. Pueden provenir de otros sistemas solares, por ejemplo, expulsados al espacio interestelar por colisiones o sometidos al efecto de honda gravitacional de un planeta o una estrella.
Cole Gregg, estudiante de doctorado en física y astronomía, ha desarrollado un modelo informático para estudiar nuestro Sistema Solar, Alfa Centauri y la actividad interestelar entre ellos. Este modelo simula la actividad interestelar en Alfa Centauri, un sistema de tres estrellas, utilizando las leyes físicas de nuestro sistema solar.
Si las estimaciones son correctas, alrededor de un millón de objetos interestelares de más de 100 metros de diámetro provenientes de Alfa Centauri podrían estar actualmente en la nube de Oort, una envoltura de cuerpos helados que rodea nuestro Sistema Solar.
El modelo también predice que hasta 10 meteoros provenientes de Alfa Centauri podrían entrar en la atmósfera terrestre cada año. Sin embargo, estos meteoros serían de tamaño microscópico y no representarían ningún peligro.
Este estudio abre nuevas perspectivas sobre la comprensión de nuestra galaxia como un sistema interconectado, donde los materiales interestelares se comparten entre las estrellas. Destaca la importancia de estudiar los sistemas estelares no de forma aislada, sino en su entorno galáctico.
Las investigaciones de Gregg y Wiegert, publicadas en
The Planetary Science Journal, muestran que la exploración de los sistemas estelares vecinos puede revelar información valiosa sobre el origen de los materiales interestelares en nuestro Sistema Solar.
¿Qué es un objeto interestelar?
Un objeto interestelar es un cuerpo celeste, como un asteroide o un cometa, que no está ligado gravitacionalmente a una estrella. Estos objetos pueden viajar a través del espacio interestelar, provenientes de otros sistemas solares.
A menudo son expulsados de su sistema de origen por colisiones o el efecto de honda gravitacional de un planeta o una estrella. Esto les permite recorrer grandes distancias en la galaxia.
El descubrimiento de tales objetos en nuestro Sistema Solar ofrece una oportunidad única para estudiar la composición y las propiedades de los materiales provenientes de otros sistemas estelares. Esto enriquece nuestra comprensión de la diversidad y la dinámica de nuestra galaxia.
¿Cómo llegan los objetos interestelares a nuestro Sistema Solar?
Los objetos interestelares pueden llegar a nuestro Sistema Solar gracias a su velocidad y a la dinámica gravitacional de la galaxia. A menudo son propulsados por interacciones gravitacionales en su sistema de origen.
Una vez en el espacio interestelar, estos objetos pueden ser capturados por el campo gravitacional de otras estrellas, incluido nuestro Sol. Esto explica por qué algunos de estos objetos pueden terminar en nuestro Sistema Solar.
El estudio de las trayectorias y velocidades de estos objetos permite a los científicos rastrear su origen y comprender los mecanismos que gobiernan su viaje a través de la galaxia. Esto abre nuevas perspectivas sobre la comprensión de las interacciones entre los sistemas estelares.
Fuente: The Planetary Science Journal