Científicos han constatado que los viajes espaciales alteran profundamente el microbioma intestinal, y sus observaciones podrían orientar las próximas misiones en el espacio.
El estudio inédito, conducido por un investigador de la Universidad McGill en colaboración con el University College Dublin, la base de datos GeneLab de la Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio (NASA) y un consorcio internacional, ofrece el retrato más detallado hasta la fecha sobre los efectos de los vuelos espaciales en la flora intestinal.
Publicado en npj Biofilms and Microbiomes, el estudio aborda los cambios ocurridos en tres meses en el microbioma intestinal, el colon y el hígado de ratones a bordo de la Estación Espacial Internacional, y se basa en tecnologías genéticas de vanguardia.
Los autores del estudio observaron variaciones significativas en algunas bacterias intestinales, compatibles con cambios en los genes hepáticos e intestinales de los ratones, lo que sugiere que los vuelos espaciales podrían deprimir el sistema inmunológico y alterar el metabolismo. Según los investigadores, esto representa un avance en la comprensión de los posibles efectos de una misión espacial prolongada en la salud de los astronautas.
"Los vuelos espaciales ocasionan efectos importantes en el cuerpo de los astronautas, pero aún no comprendemos todos los mecanismos. Las tecnologías avanzadas que hemos utilizado para estudiar simultáneamente las bacterias y los genes intestinales nos permiten ver surgir patrones que podrían explicar estos cambios y conducir al diseño de medidas preventivas para las próximas misiones", afirmó Emmanuel Gonzalez, autor principal del estudio y especialista en bioinformática del microbioma en el Centro de Investigación sobre el Microbioma de la Universidad McGill y en el Centro Canadiense de Genómica Computacional.
El estudio forma parte de un dossier de Nature Portfolio titulado The Second Space Age: Omics, Platforms, and Medicine across Space Orbits y constituye la mayor publicación hasta ahora sobre descubrimientos en biología espacial.
Los investigadores señalan que sus hallazgos podrían contribuir al éxito de las futuras misiones espaciales, ya sea para establecer una presencia a largo plazo en la luna o para enviar humanos a Marte.
Repercusiones para la salud en la Tierra
Los resultados también se aplican a la salud de las personas que nunca dejarán nuestro planeta, explica Nicholas Brereton, autor principal del estudio y profesor en el University College Dublin.
"Estos descubrimientos ponen de relieve el vínculo crucial entre las bacterias intestinales y la salud en general, especialmente en lo que respecta a la gestión de la energía y el metabolismo por parte del cuerpo. Es fundamental comprender el efecto de los vuelos espaciales en este delicado equilibrio, y no solo para la salud de los astronautas: esta comprensión también podría dar lugar a avances médicos en la Tierra", afirmó.
La investigación fue iniciada por el GeneLab Analysis Working Group for Microbes de la NASA. GeneLab está financiado por el programa Space Biology (dirección de la Misión Científica, división de Ciencias Biológicas y Físicas) de la NASA.
El artículo "Spaceflight alters host-gut microbiota interactions", por Gonzalez, E. y col., fue publicado en agosto de 2024 en npj Biofilms and Microbiomes. DOI: 10.1038/s41522-024-00545-1
Fuente: Universidad McGill