Un estudio pionero, realizado por el Profesor Mickael Naassila y su equipo del
Grupo de Investigación sobre el Alcohol y las Farmacodependencias (GRAP, laboratorio UPJV/INSERM 1247), abre nuevas perspectivas terapéuticas para el tratamiento de la adicción al alcohol utilizando psilocibina, el compuesto activo de los hongos alucinógenos.
Publicados en la revista científica
Brain, sus trabajos confirman el potencial de la psilocibina para combatir la adicción al alcohol, al mismo tiempo que descubren los mecanismos de acción de esta molécula, hasta ahora desconocidos. Un avance científico muy prometedor para frenar el flagelo de la adicción al alcohol con la ayuda de psicodélicos.
La psilocibina reduce la auto-administración de alcohol mediante la activación selectiva del núcleo accumbens izquierdo
Los resultados del estudio conducido por los científicos del Inserm y de la UPJV muestran que la administración de psilocibina en modelos murinos de adicción al alcohol reduce a la mitad su consumo de alcohol. Estos datos confirman la importancia de estudiar esta molécula en el tratamiento de la alcoholedependencia.
Para explicar estos efectos y comprender mejor los mecanismos subyacentes, los investigadores midieron, en el cerebro a nivel del núcleo accumbens, la expresión de ciertos genes conocidos por estar involucrados en la adicción al alcohol. El núcleo accumbens juega un papel central en la adicción al transmitir los efectos placenteros de las drogas y la motivación para consumirlas.
Los resultados revelan de manera sorprendente una lateralización cerebral en los efectos de la psilocibina, con una modificación de la expresión de ciertos genes, ya sea al alza o a la baja, y que es diferente dependiendo del lado izquierdo o derecho del cerebro.
Estos primeros resultados llevaron a los investigadores a explorar el papel específico del núcleo accumbens izquierdo o derecho inyectando directamente la psilocibina ya sea en el núcleo accumbens izquierdo o en el derecho.
La psilocibina inyectada en ratas no consumidoras de alcohol induce cambios particulares en el cerebro, en particular una disminución de la expresión de los receptores 5HT-2A de la serotonina únicamente en el núcleo accumbens izquierdo. De manera inesperada, el aumento de la expresión del gen BDNF, asociado con la plasticidad cerebral, se observó únicamente en el núcleo accumbens derecho.
Cuando la psilocibina se inyecta directamente en el núcleo accumbens izquierdo, reduce a la mitad el consumo de alcohol pero no tiene efecto cuando se inyecta en el núcleo accumbens derecho.
Una mejor comprensión del mecanismo involucrado en los efectos beneficiosos de la psilocibina sobre el consumo de alcohol
El estudio del equipo del Prof. Naassila fue aún más lejos para descubrir el mecanismo biológico de la psilocibina. Se sabe que los efectos alucinógenos de la psilocibina están relacionados con su acción sobre los receptores 5-HT2A de la serotonina. En este trabajo, los investigadores mostraron que estos receptores estaban sobreexpresados después del tratamiento con psilocibina. Luego, para demostrar verdaderamente que los efectos de la psilocibina sobre el consumo de alcohol están relacionados con un efecto específico sobre los receptores 5-HT2A de la serotonina, probaron el efecto de un bloqueo de estos receptores.
Y efectivamente, la infusión de ketanserina, un bloqueador de los receptores 5HT-2A, directamente en el núcleo accumbens izquierdo impide que la psilocibina reduzca el consumo de alcohol. Este bloqueo en el núcleo accumbens derecho no es eficaz.
El estudio también destaca otro posible mecanismo conocido en la adicción. La administración de psilocibina aumenta la expresión de los receptores D2 de la dopamina en el núcleo accumbens en ratas consumidoras de alcohol. Como ya se sabe que en la adicción al alcohol se observa en el animal y en el humano una disminución de la expresión de los receptores D2, estos resultados podrían también explicar cómo la psilocibina contrarresta los mecanismos de la adicción, al restaurar la expresión de estos receptores.
Este descubrimiento inédito sobre la lateralización de los efectos de los psicodélicos en el tratamiento de la adicción al alcohol abre nuevas vías de investigación. Próximos pasos: realizar un mapeo más preciso de esta lateralización y verificar si esto se generaliza a otros psicodélicos (LSD, DMT...).
Según el Prof. Mickael Naassila:
"Estos resultados son muy originales porque demuestran que la psilocibina actúa de manera diferente sobre la expresión de los genes en función del hemisferio cerebral. Y que en el cerebro, es particularmente el núcleo accumbens, pero el situado en el hemisferio izquierdo, el que parece estar implicado en los efectos de reducción del consumo de alcohol".
Fuente: Inserm