Cédric - Jueves 22 Agosto 2024

Esta proteína sabe reparar el ADN dañado: ¡una pista prometedora para curar el cáncer!

Los mecanismos de reparación del ADN desempeñan un papel esencial en la supervivencia de los organismos, especialmente en la prevención de enfermedades graves como el cáncer.

Sin embargo, estos procesos suelen estar limitados por la complejidad de los daños sufridos. Actualmente, la investigación busca comprender mejor estos mecanismos para desarrollar nuevos enfoques terapéuticos y agrícolas. En este contexto, el reciente descubrimiento de una proteína capaz de reparar el ADN abre perspectivas prometedoras.


La bacteria Deinococcus radiodurans, conocida por su capacidad para sobrevivir en ambientes extremos, constituye un modelo fascinante para los científicos. Esta bacteria puede resistir radiaciones 5.000 a 10.000 veces superiores a las que matarían una célula humana. Tal resiliencia ha llevado a los investigadores a estudiar los mecanismos internos de esta bacteria, con la esperanza de descubrir procesos de reparación del ADN que puedan aplicarse a otros organismos.


Así fue como el equipo de investigación dirigido por Robert Szabla identificó la proteína DdrC, presente en Deinococcus radiodurans, como un actor clave en la reparación de los daños al ADN. Esta proteína, al unirse a los fragmentos de ADN dañados, impide su degradación adicional y señala a otros mecanismos celulares la urgencia de la reparación. Este descubrimiento fue posible gracias al uso de la Fuente de Luz Canadiense (CLS), que permitió descifrar la estructura tridimensional de DdrC.

Las investigaciones han demostrado que DdrC funciona de manera autónoma, sin necesidad de complejas redes de proteínas para realizar su tarea. Los investigadores probaron esta proteína introduciéndola en otra bacteria, Escherichia coli. Sorprendentemente, DdrC confería a esta última una mayor resistencia a los daños causados por los rayos UV, multiplicando por más de 40 veces su capacidad de supervivencia. Esta capacidad autónoma de DdrC deja entrever aplicaciones biotecnológicas prometedoras.

La posibilidad de introducir DdrC en otros organismos, ya sean vegetales o animales, podría revolucionar áreas como la medicina y la agricultura. Al aumentar la eficacia de la reparación del ADN, esta proteína podría servir de base para la creación de vacunas contra el cáncer, o incluso para la modificación genética de cultivos haciéndolos más resistentes a las condiciones climáticas extremas.


Sin embargo, este hallazgo es solo el comienzo. El equipo de Szabla planea continuar sus investigaciones para explorar otros mecanismos presentes en Deinococcus radiodurans, con la esperanza de descubrir otras proteínas útiles para la reparación del ADN. Este trabajo podría, a largo plazo, transformar nuestra aproximación a los desafíos médicos y agrícolas actuales, ofreciendo soluciones innovadoras basadas en las capacidades excepcionales de esta bacteria.

Autor del artículo: Cédric DEPOND
Fuente: Nucleic Acids Research
Ce site fait l'objet d'une déclaration à la CNIL
sous le numéro de dossier 1037632
Informations légales