En menos de cinco años, un asteroide cercano a la Tierra de 305 metros llamado Apophis pasará a menos de 48 300 kilómetros de nuestro planeta. Los científicos planean aprovechar esta rara proximidad para recopilar datos cruciales.
El 13 de abril de 2029, Apophis será visible a simple vista. La misión OSIRIS-APEX de la NASA se está preparando para encontrarse con este asteroide, posiblemente acompañada de pequeñas sondas.
El proyecto "NEAlight", liderado por Hakan Kayal de la Universidad Julius-Maximilians de Würzburg, propone tres conceptos de sondas para aprovechar esta oportunidad única. El objetivo es comprender mejor el sistema solar y desarrollar medidas de defensa contra asteroides peligrosos.
Apophis es un tema de estudio relevante para la defensa planetaria. Descubierto en 2004, este asteroide ha sido considerado durante mucho tiempo como potencialmente peligroso debido a su tamaño y trayectoria. Hasta 2021, encabezaba las listas de riesgos de la NASA y la ESA. Después de un sobrevuelo en 2021, los científicos determinaron que Apophis no impactará la Tierra al menos durante los próximos 100 años.
La primera propuesta del proyecto NEAlight es una pequeña sonda que acompañaría a Apophis durante dos meses en abril de 2029. Esta misión autónoma tomaría fotos y medidas del asteroide antes y después de su aproximación a la Tierra.
El segundo concepto implica la integración con una misión mayor de la ESA llamada RAMSES. Esta nave estaría equipada con pequeñas sondas e instrumentos de medición. Si este proyecto se concreta, una sonda diseñada por el equipo de la JMU podría ofrecer conocimientos científicos significativos con un menor esfuerzo técnico.
Aproximación de Apophis en 2029
La tercera propuesta concierne a una sonda que sobrevolaría brevemente Apophis en su máxima aproximación, capturando imágenes. Menos costosa y más simple, esta misión tendría un tiempo de observación limitado.
El proyecto NEAlight, lanzado en mayo de 2024, busca definir los requisitos y especificaciones de las misiones para abril de 2025. Un éxito podría demostrar la eficacia de las pequeñas sondas para el estudio de asteroides y fomentar misiones futuras similares.
Fuente: NASA & ESA