Redbran - Miércoles 21 Mayo 2025

Descubrimiento: una levadura que crece en nuestra piel combate superbacterias 🦠

La piel humana alberga una multitud de microorganismos, incluidos hongos que podrían desempeñar un papel clave en nuestra salud. Un estudio reciente revela cómo una levadura común produce sustancias capaces de combatir bacterias patógenas.

Investigadores de la Universidad de Oregón han identificado una molécula producida por la levadura Malassezia, presente en la piel, que muestra propiedades antimicrobianas prometedoras. Este descubrimiento abre nuevas perspectivas en la lucha contra infecciones resistentes a los antibióticos, un problema de salud pública mayor.


Imagen de ilustración Pexels

La molécula en cuestión es un ácido graso hidroxilado, producido por Malassezia sympodialis a partir de los lípidos de la piel. Actúa destruyendo las membranas de las bacterias Staphylococcus aureus, responsables de infecciones nosocomiales. Esta acción rápida y selectiva podría inspirar nuevos tratamientos.


El estudio, publicado en Current Biology, destaca la importancia del pH de la piel en la eficacia de esta molécula. En laboratorio, las condiciones ácidas similares a las de la piel humana fueron cruciales para observar el efecto antimicrobiano, una variable a menudo ignorada en investigaciones previas.

A pesar de su potencial, también se observó resistencia bacteriana a esta molécula. Los investigadores identificaron mutaciones genéticas en Staphylococcus aureus que le permiten sobrevivir al ataque de los ácidos grasos hidroxilados.

Este descubrimiento arroja luz sobre las interacciones entre los microorganismos de la piel y su entorno. Sugiere que el microbioma cutáneo, aún poco explorado, podría albergar otras moléculas terapéuticas. Los investigadores planean ahora estudiar con más detalle estos mecanismos de resistencia.

¿Cómo actúan los ácidos grasos hidroxilados contra las bacterias?


Los ácidos grasos hidroxilados producidos por Malassezia sympodialis actúan alterando la membrana celular de las bacterias Staphylococcus aureus. Esta alteración provoca la fuga de los contenidos celulares, llevando a la muerte de la bacteria.

Estas moléculas presentan una especificidad de acción notable, atacando solo ciertas bacterias sin afectar las células humanas. Esta selectividad se debe a la estructura única de las membranas bacterianas, diferente a la de las células eucariotas.

La eficacia de estos ácidos grasos depende en gran medida de las condiciones ambientales, especialmente del pH. Un entorno ácido, como el de la piel humana, optimiza su actividad antimicrobiana, lo que explica por qué su potencial fue subestimado durante mucho tiempo en el laboratorio.

Fuente: Current Biology
Ce site fait l'objet d'une déclaration à la CNIL
sous le numéro de dossier 1037632
Informations légales