El uso intensivo y regular del cannabis podría conllevar riesgos inesperados para la salud.
Según un estudio reciente, los consumidores que sufren un trastorno por uso de cannabis (TUC) podrían estar más expuestos a ciertos cánceres de la cabeza y el cuello. Este hallazgo, aunque preliminar, suscita interrogantes sobre los efectos a largo plazo de esta sustancia en el organismo.
Imagen de ilustración Pixabay
El análisis se basó en los historiales médicos de más de 116,000 adultos estadounidenses durante un período de 20 años, destacando una correlación preocupante entre el TUC y el desarrollo de cánceres de boca, garganta y glándulas salivales. Estos pacientes, comparados con individuos sin este trastorno, presentaban un riesgo 3,5 a 5 veces mayor de desarrollar estas enfermedades.
Los investigadores utilizaron datos de TriNetX, una extensa base de información proveniente de 64 centros de salud en los Estados Unidos, para llevar a cabo este estudio. Compararon a las personas con TUC con un grupo de control similar en edad y sexo, teniendo en cuenta factores de riesgo conocidos como el consumo de alcohol y tabaco, los principales responsables de los cánceres de cabeza y cuello.
Una de las limitaciones del estudio es que no distingue entre las diferentes formas de consumo de cannabis, ya sea por inhalación o ingestión. Por lo tanto, aún no está claro si es el humo o los compuestos activos del cannabis los que son responsables del aumento del riesgo. No obstante, los autores del estudio destacan la importancia de estos resultados para la prevención de estos cánceres.
Aunque no se conocen las dosis exactas de cannabis consumidas por los participantes y los datos se basan en declaraciones personales, los resultados ponen de relieve un posible aumento de los cánceres relacionados con el consumo creciente de cannabis, especialmente con su legalización y uso más extendido.
Las implicaciones de este estudio son serias, aunque todavía es demasiado pronto para afirmar un vínculo definitivo. Serán necesarias más investigaciones para confirmar estas conclusiones y determinar si el cannabis desempeña un papel directo en la carcinogénesis.
Carcinogénesis
La carcinogénesis se refiere al conjunto de procesos biológicos que conducen a la formación de un cáncer. Este término agrupa los mecanismos por los cuales las células normales sufren transformaciones progresivas que las llevan a convertirse en cancerosas. Este proceso complejo se desarrolla en varias etapas, implicando mutaciones genéticas, alteraciones del ADN, así como modificaciones en la regulación celular.
El proceso a menudo comienza con una iniciación, donde ocurren mutaciones o lesiones del ADN, generalmente bajo el efecto de sustancias carcinógenas (agentes químicos, radiación, virus, etc.). Luego, las células mutadas experimentan una proliferación anormal, favorecida por señales de crecimiento o un entorno favorable. Finalmente, la progresión conduce a la adquisición por parte de estas células de capacidades invasivas y a la formación de tumores malignos.
La carcinogénesis está influenciada por numerosos factores, incluyendo la exposición a carcinógenos, las predisposiciones genéticas y las condiciones ambientales, lo que hace que su estudio sea crucial para la prevención y el tratamiento del cáncer.
Fuente: JAMA Otolaryngology-Head & Neck Surgery