Los sebécidos, estos cocodrilos terrestres parecidos a galgos, han sido considerados durante mucho tiempo como los amos de América del Sur después de los dinosaurios. Una serie de descubrimientos recientes en el Caribe cuestiona esta cronología, revelando su presencia hasta hace 11 millones de años.
Una representación artística de un sebécido, un cocodrilo terrestre que dominaba los ecosistemas sudamericanos.
Crédito: Jorge Machuky
Jonathan Bloch, del Museo de Historia Natural de Florida, explica que los primeros dientes encontrados en República Dominicana generaron muchas preguntas. Su forma afilada y pequeñas denticulaciones indicaban claramente un depredador en la cima de la cadena alimenticia, una sorpresa para los científicos.
El descubrimiento en 2023 de un diente acompañado de vértebras en República Dominicana permitió identificar formalmente estos fósiles como pertenecientes a un sebécido. Este hallazgo sugiere que el Caribe sirvió de refugio para estos animales mucho después de su desaparición en otros lugares.
El estudio, publicado en los
Proceedings of the Royal Society B, muestra que los sebécidos pudieron colonizar el Caribe gracias a puentes terrestres temporales. Esta hipótesis, conocida como GAARlandia, podría explicar cómo estos depredadores llegaron a las islas.
Los sebécidos, últimos representantes de los Notosuchia, eran muy diferentes a los cocodrilos modernos. Su estilo de vida terrestre y dieta carnívora los convertía en depredadores temibles, capaces de competir con los dinosaurios terópodos.
Este descubrimiento abre nuevas perspectivas sobre la historia evolutiva del Caribe. También muestra la importancia de las islas como conservatorios de biodiversidad, preservando especies mucho tiempo después de su desaparición en los continentes.
Los paleontólogos ahora exploran nuevos métodos para descubrir fósiles más antiguos en el Caribe. Estos esfuerzos podrían revelar más sorpresas sobre la historia natural de esta región rica en biodiversidad.
¿Qué es GAARlandia?
GAARlandia es una hipótesis científica que propone que un puente terrestre o cadena de islas conectó temporalmente América del Sur con el Caribe. Esta conexión habría permitido a diversas especies terrestres, incluidos los sebécidos, colonizar las islas.
Esta teoría se basa en evidencias geológicas y paleontológicas, sugiriendo que este corredor existió hace millones de años. Habría jugado un papel clave en la dispersión de especies entre ambas regiones.
Los recientes descubrimientos de fósiles de sebécidos en el Caribe fortalecen esta hipótesis. Indican que estos depredadores pudieron llegar a las islas por esta vía, sobreviviendo mucho después de su desaparición en el continente.
GAARlandia ofrece así una explicación plausible a la presencia de especies terrestres en el Caribe, enriqueciendo nuestra comprensión de la evolución de los ecosistemas insulares.
¿Cómo dominaron los sebécidos sus ecosistemas?
Los sebécidos eran depredadores temibles, adaptados a una vida completamente terrestre. Sus miembros largos y ágiles les permitían perseguir presas con notable eficiencia, al estilo de los dinosaurios terópodos.
Su dentición, con dientes afilados y denticulados, estaba perfectamente adaptada para desgarrar carne. Algunas especies podían alcanzar 6 metros de largo, con armadura ósea para protegerse.
Tras la extinción de los dinosaurios, los sebécidos rápidamente se convirtieron en los depredadores dominantes en América del Sur. Su éxito evolutivo testifica su adaptabilidad y eficiencia como cazadores.
Su presencia en el Caribe, mucho después de su desaparición en otros lugares, muestra su capacidad para colonizar nuevos hábitats. Esta resiliencia hace de los sebécidos un tema de estudio fascinante para los paleontólogos.
Fuente: Proceedings of the Royal Society B