En los jóvenes adultos propensos a las psicosis, se ha observado una reducción de la conectividad cerebral, una disfunción que el consumo de cannabis parece agravar, según un nuevo estudio. Este descubrimiento podría permitir el desarrollo de tratamientos dirigidos a síntomas psicóticos que no son tratados por los medicamentos actuales.
Imagen de ilustración Pexels
En el marco de un estudio inédito, un equipo de investigación de la Universidad McGill constató que la densidad sináptica era notablemente más baja en personas con riesgo de psicosis que en los sujetos sanos del grupo de control. La sinapsis es la zona situada entre dos neuronas que asegura la transmisión de información de una a otra.
"La psicosis no afecta a todos los consumidores de cannabis, pero en algunas personas, el riesgo es elevado. Nuestros trabajos arrojan luz sobre las causas de este alto riesgo", explica la Dra. Romina Mizrahi, autora principal del estudio y profesora del Departamento de Psiquiatría de la Universidad McGill.
"Parece que el cannabis desregula el mecanismo natural de fortalecimiento y poda sináptica, esencial para el desarrollo de un cerebro saludable."
Posibilidades para el desarrollo de nuevos tratamientos Con ayuda de una tecnología avanzada de imágenes cerebrales, el equipo estudió a 49 personas de entre 16 y 30 años, algunas de las cuales habían presentado síntomas recientes de psicosis o eran consideradas de alto riesgo. Publicados en *JAMA Psychiatry*, los resultados del estudio indican que una baja densidad sináptica está asociada con comportamientos de aislamiento social y falta de motivación, problemas difíciles de tratar, precisan los científicos.
"La gran mayoría de los medicamentos actuales se enfocan en las alucinaciones, pero no tratan los síntomas que dificultan las interacciones en sociedad, en el trabajo o en la escuela", dice Belen Blasco, autora principal del estudio y doctoranda en el Programa Integrado en Neurociencias de la Universidad McGill. "La investigación sobre la densidad sináptica podría conducir al desarrollo de tratamientos capaces de mejorar las competencias sociales y la calidad de vida de los pacientes."
Ya se sabía que el cannabis era un factor de riesgo para la psicosis, e incluso para la esquizofrenia, pero gracias a este estudio, un equipo de investigación ha conseguido medir por primera vez, en tiempo real, cambios estructurales en el cerebro de personas con alto riesgo.
El próximo paso para el equipo de investigación será determinar si los cambios observados podrían permitir predecir la aparición de trastornos psicóticos y, eventualmente, intervenir antes de que aparezcan los síntomas.
El estudio fue realizado en el Instituto Universitario de Salud Mental Douglas y en el Instituto-Hospital Neurológico de Montreal de la Universidad McGill, y fue financiado por los Institutos de Investigación en Salud de Canadá.
Referencia:
El artículo "Synaptic Density in Early Stages of Psychosis and Clinical High Risk", por Belen Blasco, Kankana Nisha Aji, Romina Mizrahi y col., fue publicado en *JAMA Psychiatry*.
Fuente: Universidad McGill