Astrónomos han hecho recientemente un descubrimiento importante en nuestro Sistema Solar. Han identificado 128 nuevas lunas orbitando alrededor de Saturno, casi duplicando el número total de satélites naturales conocidos del planeta.
Este hallazgo coloca a Saturno significativamente por delante de Júpiter en términos de número de lunas. Con un total de 274 lunas conocidas, Saturno es, por mucho, considerado el planeta con el mayor número de satélites naturales en nuestro Sistema Solar.
Una ilustración de Saturno y sus anillos.
Crédito: NASA/JPL-Caltech
Estas nuevas lunas pertenecen al grupo nórdico de Saturno, caracterizado por órbitas retrógradas y elípticas. Se consideran lunas "irregulares", de pequeño tamaño y probablemente resultantes de colisiones pasadas.
El descubrimiento fue posible gracias al telescopio Canadá-Francia-Hawái (CFHT), que escaneó el cielo alrededor de Saturno entre 2019 y 2021. Los investigadores confirmaron estos hallazgos en 2023, después de una nueva serie de observaciones.
Edward Ashton, astrónomo del Instituto de Astronomía y Astrofísica de la Academia Sinica en Taiwán, dirigió este estudio. Explica que estas lunas son probablemente fragmentos de lunas más grandes, destruidas durante colisiones hace aproximadamente 100 millones de años.
Los investigadores estiman que Saturno probablemente ha alcanzado el número máximo de lunas detectables con la tecnología actual. Planean suspender sus investigaciones hasta que se desarrollen nuevos telescopios más potentes.
Este estudio, aunque aún no ha sido revisado por pares, ha sido publicado en la revista
arXiv y reconocido por la Unión Astronómica Internacional. Abre nuevas perspectivas sobre la evolución de los sistemas de lunas alrededor de los planetas gigantes.
¿Qué es una luna irregular?
Las lunas irregulares son satélites naturales que orbitan alrededor de un planeta en trayectorias a menudo distantes e inclinadas. A diferencia de las lunas regulares, no siguen una órbita cercana y circular alrededor de su planeta anfitrión.
Estas lunas suelen ser de pequeño tamaño, a menudo de solo unos pocos kilómetros de diámetro, y su forma dista mucho de ser esférica. Generalmente son capturadas por la gravedad del planeta después de haberse formado en otro lugar del Sistema Solar.
Las lunas irregulares pueden orbitar en el mismo sentido que la rotación de su planeta (órbita prograda) o en sentido opuesto (órbita retrógrada). Su presencia y características proporcionan pistas valiosas sobre la historia de las colisiones y las interacciones gravitacionales en el Sistema Solar.
¿Cómo descubren los astrónomos nuevas lunas?
El descubrimiento de nuevas lunas alrededor de planetas gigantes como Saturno requiere observaciones minuciosas y repetidas. Los astrónomos utilizan telescopios potentes para escanear el cielo alrededor de estos planetas, en busca de pequeños puntos luminosos en movimiento.
Una vez que se detecta un objeto potencial, los investigadores deben seguir su movimiento durante varias noches para confirmar que está en órbita alrededor del planeta. Esto permite distinguir las lunas de asteroides u otros objetos celestes que pasan cerca.
Los avances tecnológicos, como los telescopios equipados con cámaras muy sensibles, han aumentado considerablemente la capacidad de los astrónomos para detectar lunas cada vez más pequeñas y distantes. Sin embargo, la confirmación definitiva de estos descubrimientos puede llevar años de observaciones adicionales.
Fuente: arXiv